HISTORIAS DEL OTRO LADO DE LA BARRA Nº1
DE COMO "JULIETA" BUSCA QUE TE BUSCA SE TOPO CON "ROMEO".
..."Si Dios existe, la verdad, es que tiene un raro sentido del humor"... (Anonimo)
Corria una bonita madrugada de verano, otra larga noche de poner copas que llegaba a su fin, la gente terminaba sus consumiciones y el dj empezaba a pinchar sus últimos temas con idea de ir acabando la sesión. Habia sido una noche tranquila, sin incidentes señalables, cuando de pronto aparecio "ella", le llamabamos ella por no llamarle "eso".
En "ella" se habia ensañado la creación de una manera asombrosa, dolian los ojos de mirarla, no mediria más de 1,60, estaba descomunalmente gorda, poseia un enorme pico sobre la boca que al final pudimos identificar como la nariz, tenia un problema de alopecia en la cabeza importantísimo pero no obstante poseia una majestuosa mata de pelo bajo el pico, tenia las facciones de la cara muy marcadas con una barbilla finísima que se extendia hasta una enorme papada (o buche) para desaparecer en el cuello... ¿Cuello?, no tenia cuello, incluso podria decir que tenia los hombros por encima de las orejas (joder que orejas). Por si eso fuera poco tenia el cuerpo "raro"... una teta más caida que la otra y los brazos increiblemente finos en comparación con la descomunal volumen del resto de su anatomia y ademas juraria que cojeaba.
A "ella" seguramente no le importaban o no veia sus "peculiares características" y se habia vestido con el vestuario standard de "tia buena". Seguramente necesito ayuda para domar las dos desiguales tetas y meterlas dentro del escote desde el cual clamaban por su libertad y amenazaban con salir y ser libres, seguramente tambien necesito untarse grasa para que le entrara es minifalda desde la cual asomaban dos patorras que incluso poseian más movimiento de carne que sus compañeras de cuerpo las tetas.
A "ella" le daba igual lo que los demas pensasen de como bailaba pero la realidad era que regalaba generosas visiones de chicha bamboleante a miradas de caras descompuestas por el asco y las arcadas.
"Ella" estaba completamente borracha, completamente cachonda y completamente desesperada.
"Ella" se dirigio a la barra decididamente pero sin paso firme cuando derrepente un pobre infeliz cometio el error de pasar por donde abarcaba el angulo de visión de "ella", "ella" inmediatamente se abalanzó sobre el como cazador sobre presa, el pobre hombre no pudo hacer nada, despues de un par de frases del tipo (leanse con voz de apuntodelcomaetílico): ..."eressss muuuuy apooooo"..., ..."stassssss muuuuuy wenooooo"... (la verdad es que "ella" era un adefesio, pero un adefesio exigente), arrimarle la cebolleta y meterle mano por todo el cuerpo (unos 20seg.) inmediatamente pasaba al ataque y se lanzaba a comerle el morro.
El retrocedia horrorizado, con las cara descompuesta por el pánico, intentando huir hacia cualquier lado, pero"ella" era fuerte y "ella" no soltaba una presa tan facilmente, no obstante el miedo obra milagros y el consiguio zafarse de "ella" gracias a una increible cinta y huir hacia el gentio.
"Ella" no se iba a dar por vencida, al cabo de 20 min. ya habia utilizado su técnica de arrimar en 20 seg. con 17 tios (contados, con-ta-dos) en una superficie menor a 10 m2 (Frente a la barra), los tios intentaron las más diversas técnicas que sus cerebros paralizados por el pánico podian discurrir a duras penas para librarse del abrazo del oso con que "ella" procedia, de hecho en esos 20 min., le pagaron 3 copas 3 tios que no la conocian de nada y con la firme voluntad de no liarse con "ella" solamente para que "ella" les soltase y ocupase la boca con otra cosa que no fuera intentar comerle los morros. Dato de interes variable: "ella" bebia calimocho.
La noche se acababa y "ella" no consegui a encontrar a su principe azul (¿realmente le importaba el color?, ¿realmente le importaba que fuera un principe?). Todo apuntaba a otra vuelta a casa en la más completa soledad y con serias amenazas de una futura y brutal resaca, cuando derrepente... Aparecio "El".
Montado en su descomunal borrachera aparecio cabalgando como principe galopando y cometio el error de que al dirigirse a la barra paso por el radio de acción (zona de caza) de "ella".
"El" mostro sorpresa, "Ella" actuo segun lo venia haciendo y los dos se fundieron en un profundo beso (snif) que hizo respirar aliviados a los hombres de sexo masculino que evitaban pasar por cierta zona del local y echar hasta la bilis al suelo a más de uno desperdiciando una valiosa inversión económica en líquidos. "El" tampoco era un díos griego pero aun así desentonaba increiblemente con"ella".
¿Final feliz? JUAS!!!
Tras unos 5 min. de amorosos flirteos, "ella" se separo de "El" y intento comerse a otros tres delante de "El", los hombres del sexo masculino que se creian a salvo volvieron a salir de la zona de caza despavoridos, daba igual quien fuera, tras un breve rechazo un par de tumbos hacia un lado y ¡hop! mediavuelta, se enganchaba a lo primero que pillaba.
Pero el destino hizo que en uno de esos tumbos "ella" se reencontrase con "el" [ duda razonable: ¿Sabia "ella" que "el" era el mismo "el" que el de antes? ].
Los deje alli comiendose el morro y cuando volvi habian desaparecido, un montón de dudas asaltan mi mente (¿se fueron juntos?, ¿se enamorarán?, ¿se casarán?, ¿tendrán hijos?) pero como dijo un sabio individuo: Hay cosas que es mejor no preguntarse ni saber nada de ellas, ni siquiera que existen.
Esta es una historia de amor verídica, salpicada por la magia de la noche, la luz de las estrellas, el calor de una noche de verano y litros de alcohol en sangre.
Lección a aprender: Hay días en los que es mejor no levantarse.
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