CARTA EN REFERENCIA AL DECORO Y EL SABER ESTAR DE LA CLIENTELA
Queridos clientes me dirijo a ustedes otra vez para sujerirles varios consejos de comportamiento para que no queden como unos verdaderos estúpidos, que tal vez sea cierto que ustedes son estúpidos, no obstante, no desearán parecerlo delante de todo el mundo.
En primer lugar me dirijo a usted para comentarle un sucio vicio que tiene usted cuando va con un par de copas de más junto con su acompañante, usted tiene la mania de meter su mano, incluso en ocasiones las dos, por debajo del top o camiseta de su acompañante, con el propósito de tocarle uno o ambos pechos. Ya se que el generoso escote que lleva su acompañante y el hecho de que ella no lleve sujetador invitan a ello y que a ella, en según que ocasiones, no parece importarle, pero le pido sinceramente que deje de hacerlo porque es de muy mala educación mostrar a los demás lo que no pueden tocar y lo que si puede usted tocar. Por cierto, no hace falta que lo haga tan disimuladamente puesto que entre que está borracho y calentorro, todos nos enteramos siempre de quien toca las tetas a quien.
En segundo lugar me dirijo a usted para comentarle un segundo sucio vicio que tiene usted sin que sea necesario que esté minimamente borracho, tiene usted la mania de arrinconar a su acompañante contra la barra, subirle un poco la falda, bajarse usted un poco la bragueta y echar un polvo en mis narices haciendo como si disimulan y anda que no es dificil disimular estar follando. Eso es de muy mala educación puesto que mientras ustedes se lo están pasando muy bien yo estoy trabajando y lo más seguro es que se vacie una cubitera repleta de agua y hielo sobre ustedes y su punto de unión. En honor a la verdad diré que normalmente lo harán de esa manera debido al avanzado estado de embriaguez en el que se encuentran, no obstante les animo a probar otras areas de la discoteca donde podrán dar rienda suelta a sus pasiones con más disimulo y educación, como son las zonas oscuras, donde le verán igual pero no le reconocerán si no están cerca y por supuesto los baños donde una legión de meadores y "meadores", aporrearán la puerta invitándole, con pocas amables palablas, a eyacular lo antes posible, sin embargo, tambien puede optar por irse a follar a su puta casa, a su puto coche o a la puta calle.
En tercer lugar, le pido que lea atentamente puesto que la falta de decoro en este aspecto puede costarle un botellazo... ...En tercer lugar le pido que no se me orine en la barra, aunque la cola para entrar al baño sea infinita, busque otro sitio tanto dentro como fuera del local. No aproveche que está pidiendo sus bebidas para, disimuladamente, sacarse la cola y ponerse a orinar a los pies de la barra, aprovechando el angulo muerto que crea la altura de la barra contra su cuerpo, eso es de malísima educación y el correctivo disponible no es otro que la agresión física inmediata y no por parte del camarero habitualmente, sino por parte de otro cliente al cual se le están meando en los zapatos, puesto que para hacer esto se necesita que haya mucha gente y sinceramente, esa cara de imbécil que pone usted solo pueden ser de dos cosas: o se la están chupando o se está meando.
Así pues estimado cliente espero que estas tres puntualizaciones le sirvan para comportarse con más decoro y educación en los sitios públicos, puesto que salvo el sexo y defecaro u orinar en público todo lo demás me parece educado.
Atentamente el que le escupio en el vaso.
El Barman.
En primer lugar me dirijo a usted para comentarle un sucio vicio que tiene usted cuando va con un par de copas de más junto con su acompañante, usted tiene la mania de meter su mano, incluso en ocasiones las dos, por debajo del top o camiseta de su acompañante, con el propósito de tocarle uno o ambos pechos. Ya se que el generoso escote que lleva su acompañante y el hecho de que ella no lleve sujetador invitan a ello y que a ella, en según que ocasiones, no parece importarle, pero le pido sinceramente que deje de hacerlo porque es de muy mala educación mostrar a los demás lo que no pueden tocar y lo que si puede usted tocar. Por cierto, no hace falta que lo haga tan disimuladamente puesto que entre que está borracho y calentorro, todos nos enteramos siempre de quien toca las tetas a quien.
En segundo lugar me dirijo a usted para comentarle un segundo sucio vicio que tiene usted sin que sea necesario que esté minimamente borracho, tiene usted la mania de arrinconar a su acompañante contra la barra, subirle un poco la falda, bajarse usted un poco la bragueta y echar un polvo en mis narices haciendo como si disimulan y anda que no es dificil disimular estar follando. Eso es de muy mala educación puesto que mientras ustedes se lo están pasando muy bien yo estoy trabajando y lo más seguro es que se vacie una cubitera repleta de agua y hielo sobre ustedes y su punto de unión. En honor a la verdad diré que normalmente lo harán de esa manera debido al avanzado estado de embriaguez en el que se encuentran, no obstante les animo a probar otras areas de la discoteca donde podrán dar rienda suelta a sus pasiones con más disimulo y educación, como son las zonas oscuras, donde le verán igual pero no le reconocerán si no están cerca y por supuesto los baños donde una legión de meadores y "meadores", aporrearán la puerta invitándole, con pocas amables palablas, a eyacular lo antes posible, sin embargo, tambien puede optar por irse a follar a su puta casa, a su puto coche o a la puta calle.
En tercer lugar, le pido que lea atentamente puesto que la falta de decoro en este aspecto puede costarle un botellazo... ...En tercer lugar le pido que no se me orine en la barra, aunque la cola para entrar al baño sea infinita, busque otro sitio tanto dentro como fuera del local. No aproveche que está pidiendo sus bebidas para, disimuladamente, sacarse la cola y ponerse a orinar a los pies de la barra, aprovechando el angulo muerto que crea la altura de la barra contra su cuerpo, eso es de malísima educación y el correctivo disponible no es otro que la agresión física inmediata y no por parte del camarero habitualmente, sino por parte de otro cliente al cual se le están meando en los zapatos, puesto que para hacer esto se necesita que haya mucha gente y sinceramente, esa cara de imbécil que pone usted solo pueden ser de dos cosas: o se la están chupando o se está meando.
Así pues estimado cliente espero que estas tres puntualizaciones le sirvan para comportarse con más decoro y educación en los sitios públicos, puesto que salvo el sexo y defecaro u orinar en público todo lo demás me parece educado.
Atentamente el que le escupio en el vaso.
El Barman.
2 comentarios
Jesús -
HOUSEBOY -
Un saludo de parte de toda una plantilla de camareros en algun lugar de Zgz. (de cuyo nombre no quiero ni acordarme...)